Un día decidí salir a la deriva, intenté prestar atención a todas aquellas cosas que normalmente pasaba por alto cuando utilizaba la el lugar público como mero hecho de comunicación entre mis destinos.
Sin embargo aquel día no tenía un destino predeterminado, simplemente me dejaba llevar por las calles sin un rumbo fijo.
Transité por las calles, parques y demás lugares públicos sin mucho éxito, lo cual me llevó a tomar la decisión de ver la ciudad desde otra perspectiva, desde un vehículo.
Montado en un vehículo, la ciudad se mira con otros ojos, es posible que te pierdas algunos detalles, ya que no te fijas tanto debido a que tienes que prestar atención a la circulación, pero en mi caso me fijé que muchos vehículos no respetan los pasos de cebra, ya sea voluntaria e involuntariamente.
La causa de haber elegido a Manuel Delgado, ha sido principalmente gracias al hecho de que el rumbo del proyecto ha sido más o menos constante y he tenido que salir a la calle para darme cuenta de algunas cosas.
El nuevo rumbo del proyecto no está totalmente definido, tal vez vaya encaminado por hacer algo en un lugar público, ya sea sobre el paso de cebra (como he ido haciendo hasta ahora) o en otro ámbito.
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